Un vistazo al arte monumental y rebelde, positivo y exclusivo.

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En el arte vale todo, o casi todo. Se le pide como mínimo que provoque reacciones en el espectador y que nos estimule para seguir creyendo en él. Os dejo este vistazo al arte monumental y rebelde, positivo y exclusivo. Tan personal y distinto entre sí.

«Pasaré mi vida cuestionándolo todo. Me enamoraré del signo de interrogación». No hay constancia de que la artista Niki de Saint Phalle (1930-2002) fuera una persona preocupada por la gramática, pero lo que sabemos con certeza es que era un espíritu libre e inquieto desbordante de creatividad y energía.

Lo tenía todo para ser un icono in de los 60: joven, guapa, feminista y artista polifacética.

 

[youtube width=»600″ height=»400″]https://www.youtube.com/watch?v=9BJgIED7gBk [/youtube]

 

El pop excéntrico de Niki de Saint Phalle fue tan popular como el de Warhol en Nueva York. Creadora de esculturas y lugares mágicos, la artista franco americana se reveló como heredera de los grandes Dalí y sobre todo Gaudí o más concretamente del emblemático Parc Güell que conoció durante una visita a Bacelona en los años 50 y que significó la identidad de su obra a lo largo de su vida.

Se rebeló a través de su universo feminista y social mostrando al mundo su particular visión del cuerpo de la mujer. Distorsionó los cánones estéticos y sociales con sus esculturas. Su reconocida serie de Nanas realizada en la década de los 60 o los provocadoramente teatrales Shooting Paintings, «murders with no victims», que consistían en explosionar a balazos bolas de yeso y botes de spray rellenos de pintura para decorar sus obras. Convertida en una amazona del arte moderno, se ganó el respeto de la crítica y de los Nouveaux Realistes.

Pudimos ver su exposición hace un mes en el Museo Guggenheim Bilbao. Monumental.

 

En las antípodas pictóricas de Saint Phalle tenemos un Museo del Prado que (gracias a la tecnología led) renueva literalmente la luz que arroja sobre sus obras. Ya podemos disfrutar del impresionismo luminoso de las pinturas de Joaquín Sorolla y de sus conocidas escenas de playa bañadas ahora con la luz concebida por su creador. Frescura, cercanía y naturalidad renovada para el gran maestro valenciano y una visión más fiel y pura para todo el conjunto artístico del museo.

 

"Pasaré mi vida cuestionándolo todo. Me enamoraré del signo de interrogación". No hay constancia de que la artista Niki de Saint Phalle fuera una persona preocupada por la gramática, pero lo que sabemos con certeza es que era un espíritu libre e inquieto desbordante de creatividad y energía.  Lo tenía todo para ser un icono in de los 60: joven, guapa, feminista y artista polifacética.  https://www.youtube.com/watch?v=9BJgIED7gBk  El pop excéntrico de Niki de Saint Phalle fue tan popular como el de Warhol en Nueva York. Creadora de esculturas y lugares mágicos, la artista franco americana se reveló como heredera de los grandes Dalí y sobre todo Gaudí, o más concretamente del emblemático Parc Güell que conoció durante una visita a Bacelona en los años 50 y que significó la identidad de su obra a lo largo de su vida. Se rebeló a través de su universo feminista y social mostrando al mundo su particular visión del cuerpo de la mujer. Distorsionó los cánones estéticos y sociales a través de su serie de Nanas realizada en la década de los 60 y los provocadoramente teatrales Shooting Paintings, "murders with no victims", consistían en explosionar a balazos bolas de yeso y botes de spray rellenos de pintura para decorar sus obras. Convertida en una amazona del arte moderno, se ganó el respeto de la crítica y de los Nouveaux Realistes. En las antípodas pictóricas de Saint Phalle tenemos un Museo del Prado que (gracias a la tecnología led) renueva literalmente la luz que arroja sobre sus obras. Ya podemos disfrutar del impresionismo luminoso de las pinturas de Joaquín Sorolla y de sus conocidas escenas de playa bañadas ahora con la luz concebida por su creador. Frescura, cercanía y naturalidad renovada para el gran maestro valenciano y una visión más fiel y pura para todo el conjunto artístico del museo. Paseo a orillas del mar. Sorolla (1909). Sencillez, positivismo y vitalidad.

Paseo a orillas del mar. Sorolla (1909). Sencillez, positivismo y vitalidad.

 

Art Basel es la exclusiva feria de arte en Basilea, Suiza, donde a orillas del Rhin coleccionistas de alto nivel y profesionales de nivel internacional se dieron cita ayer en su 46ª edición.

Precios prohibitivos en la plataforma por excelencia del arte contemporáneo que ni siquiera los museos pueden permitirse. La suma de las obras presentes en la exposición tiene un valor de 2600 millones de euros.

La creación moderna, el mecenazgo, y los clics en Instagram van a ser protagonistas en este evento de proporciones épicas. «Stacked«, la obra de Ai Weiwei, el polémico artista chino, ya vuela por la redes.

En Art Basel se presentan obras de Magritte, Ernst, Chagall, Miró, y, por supuesto, Picasso.

WANDERLUST

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Wanderlust. Un término de moda que en poco tiempo se ha adueñado de las redes sociales, los blogs y la publicidad. Después de guguelear un rato, la definición más recurrente y precisa que os puedo ofrecer es la siguiente: «Un fuerte impulso o deseo por vagar, viajar y explorar el mundo».

La palabra de origen alemán estaba formada por wandern (viajar) + lust (disfrute). El inglés la tomó prestada y la transformó en lo que hoy conocemos como Wanderlust o pasión por viajar.

Wanderlust nos llama a experimentar lo desconocido. A dejar atrás una rutina sin sentido. Al desafío de lo imprevisible. A arriesgarse a descubrir culturas, estilos de vida y comportamientos nuevos.

 

Fernweh

En español no tenemos una palabra que defina este ansia por escapar y descubrir nuevos lugares. Sin embargo otras lenguas reflejan en su vocabulario el sentimiento o «necesidad de distancia». En alemán se conoce como Fernweh y tiene su antónimo en Heimweh (nostalgia).

 

El turismo idiomático, cada vez más en boga, se asocia con esta modalidad viajera. Queremos una experiencia más completa, algo así como «ya que me abro camino y quiero descubrir un lugar nuevo, por qué no aprender su idioma también». Este enfoque lingüístico-vacacional es la manera más llevadera e inteligente de aprender una lengua. Mejor cultivar un idioma en un ambiente auténtico y si la aventura nos acompaña, mejor.

Pero cuando oímos la palabra Wanderlust nadie piensa en viajes de negocios ni en aburridas excursiones organizadas. Más bien divisamos imágenes de solitarias playas perdidas en alguna parte, autobuses desvencijados dirigiéndose hacia una puesta de sol, sonrisas, parajes montañosos que solo se pueden recorrer con una mochila al hombro y mucho tiempo por delante o pintorescas y vibrantes escenas urbanas cargadas de tipismo y multi-cultura.

Decir de paso que esta tendencia ha sido útil para recuperar la memoria de escritores errantes como Mark Twain, Antoine de Saint-Exupéry, Truman Capote, Pablo Neruda o el español Pío Baroja. De alguna manera los clásicos literarios son los que mejor entienden este deseo de perderse y experimentar lo auténtico. El valor de lo esencial prevalece sobre lo accesorio y lo primitivo, sobre lo flamante y moderno. Si no, que se lo pregunten a Joseph Conrad.

El neologismo en cuestión lleva en su ADN una desesperada huída hacia adelante en la que todas las unidades de tiempo importan, como en una road movie cuenta el conjunto. El viaje como liberación tiene un componente espiritual. Nos influye la clase de desconexión voluntaria que deja pasar aquella información que nos hace sentir bien. Captar los instantes de magia, impagables y nuevos, que nunca se volverán a repetir. De vuelta a casa queremos un yo renovado, en la línea de la conciencia zen.

El tiempo vuela y deberíamos volar con él, o al menos viajar para perdernos o para encontrarnos o como cantaban Los Zombies en 1980 (aquel cuarteto adolescente que puso banda sonora a los primeros años de la Movida), para buscar desesperadamente al ser amado.

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Hablantes bilingües. 5 ventajas a tener en consideración.

hablantes  bilingües

Los hablantes bilingües tienen el doble de posibilidades de salir de un apuro.

 

¿Qué tienen en común las actrices Penélope Cruz, Gwyneth Paltrow o la encantadora Lupita Nyong’o? Efectivamente, son bilingües. Hablan español e inglés perfectamente.

Los hablantes bilingües tienen el doble de posibilidades, lingüísticamente hablando, a nivel social, laboral o incluso sobre la alfombra roja ya que su mensaje podrá ser enviado en dos lenguas distintas. Un ejemplo de la soltura o swing que aporta el bilingüismo es la actriz keniana-mexicana y recientemente ganadora del Oscar Lupita Nyong’o. A continuación nos habla de cómo aprendió español en Méjico.

 

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Pero, ¿qué significa ser bilingüe? Una persona bilingüe tiene la capacidad para comunicarse de forma independiente y alterna en dos lenguas. También hace referencia a la coexistencia de dos lenguas en un mismo territorio. El fenómeno, por consiguiente, posee una vertiente individual y otra social. Por este motivo, es objeto de estudio de distintas disciplinas (sociolingüística, psicolingüística, neurolingüística, pedagogía, etc.).

No cabe duda de que los bilingües tienen un mayor número de ventajas sobre aquellos que conocen un único idioma. He intentado sintetizar en 5 las que considero más importantes:

1. Si la segunda lengua se aprende en la infancia mejor que mejor. Los niños pequeños aprenden el segundo idioma por imitación, generalmente en casa y en colegios bilingües. Está demostrado que su capacidad para la comunicación,  su conocimiento y gestión de la información global será superior a la media. Una mente bilingüe genera más ideas y tiene mayor facilidad para funcionar en «modo multitarea». También les será más fácil aprender nuevos idiomas en el futuro.

2. El Alzheimer es una realidad con la que tenemos que convivir. Pero a los hablantes bilingües con un cerebro entrenado en dos idiomas propensos a desarrollarla, la enfermedad les llegará mucho mas tarde que a los hablantes monolingües. Sus efectos (degeneración cognitiva) serán menos drásticos gracias al hecho de haber mantenido el cerebro activo intercambiando información entre dos lenguas.

3. No tiene nada que ver viajar hablando sólo  tu lengua materna que hacerlo siendo bilingüe (un español siempre pensará en el inglés. Un extranjero probablemente en el español). Es una cuestión de mejorar la calidad de nuestro tiempo (evitar traducciones, malentendidos y solucionar problemas) y de sentirse uno realizado al interactuar con la cultura, el arte o los medios de comunicación de primera mano. Una segunda lengua te hará percibir el mundo de forma más global, culturalmente hablando, y a sentirte un ciudadano más conectado por el lenguaje donde quiera que estés. Al hablar la lengua de otra comunidad, podremos hacer nuestras con más facilidad sus tradiciones y estilo de vida.

4. la cuarta ventaja habla por sí sola. El mundo del trabajo. El bilingüe tiene más posibilidades de encontrar trabajo y de encontrarlo fuera de su país. Las opciones crecen de manera exponencial y en calidad también. ¿Además, quién querría estar en una oficina o un trabajo de proyección internacional siendo el único hablante monolingüe? El momento en el que sonara el teléfono sería una película de terror.

Por otro lado, a nivel académico, es necesario en muchos países el dominio de una segunda lengua para acceder a la Universidad.

5. . O lo que en su globalidad significa para ti hablar dos idiomas. Lo he dejado para el final pero lo considero el más importante. No todos los bilingües (o trilingües) han aprendido su segunda lengua en la infancia. No todos padecerán Alzheimer. No todos lo necesitarán en su trabajo o tendrán una capacidad viajera. Pero hay beneficios comunes para los que lo somos. El bilingüe que mantiene una actitud activa y curiosa por añadir matices lingüísticos a lo que ya sabe, observa e interactúa con la vida de manera más abierta reflejándose esto en su autoestima. Al estar expuesto a un mayor número de canales de información (estímulos proporcionados fruto de su dualidad lingüística), aumentan su creatividad, inteligencia emocional, sus relaciones sociales, tolerancia y también su empatía.

El cerebro bilingüe procesa mejor la información, es más grande y se mantiene joven durante más años. Está demostrado que nuestro cuerpo y mente mejoran su unión al dominar más idiomas.

Aprender y entender mejor, como conclusión del bilingüismo.

 

Syllabus is the young Spanish school for the people who ♥ Spanish

Niños y jóvenes, ¿qué necesitan de los adultos?

Hacia la playa

 

El recorrido de la vida es comparable a un «Camino de Santiago» donde las primeras etapas son decisivas en el desarrollo emocional de los niños. Con este símil, la experta en coaching Ana G. Medialdea, vuelve a escribir para Syllabus acercándonos cuestiones que interesarán tanto a profesores y educadores como a alumnos. Gracias Ana.

Decía Oscar Wilde que el mejor medio para hacer buenos a los niños es hacerlos felices. Partiendo de esta afirmación y de la realidad incuestionable de que los niños y jóvenes de hoy son los adultos de mañana y, por tanto, son ellos los que pueden crear un mundo mejor, parece evidente que una de las responsabilidades y compromisos más importantes que tenemos como padres, profesores, educadores o simplemente como miembros de la sociedad es poner todo de nuestra parte para contribuir a su desarrollo mental, emocional, espiritual y físico.

Vivir es como ser peregrino en el Camino de Santiago; se van recorriendo etapas que pasan y no vuelven más que en los recuerdos. Sin embargo, las experiencias vividas en cada etapa van dejando huella y marcan nuestras pautas de conducta, nuestras decisiones y, en definitiva, nuestra vida de una forma sorprendente aunque habitualmente no caemos en cuenta, en el mejor de los casos, hasta bien entrada la edad adulta.

Webinars, el futuro del aprendizaje online.

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Webinars, una nueva palabra a tener en cuenta en el mundo de la educación. El término cada vez se oye y se lee más, pero, ¿qué son exáctamente? ¿Nos pueden ayudar a aprender español? Martí Ayma,nuestro escritor invitado de esta semana es un experto en la materia. Dejemos que él nos ilustre.

Debido al avance de la tecnología y a internet, el mundo está cada vez más interconectado y existen menos barreras para acceder a la educación. En los últimos años han surgido muchos programas de educación online en los que los estudiantes de todo el mundo pueden aprender sobre temáticas de su interés mediante vídeos y ejercicios teniendo el correo electrónico como único punto de comunicación con los profesores. Pero, ¿han oído hablar de los webinars? ¡Son el futuro del aprendizaje a distancia!

¿Qué es un webinar?         

La palabra webinar se formó a partir de la expresión “Web-based seminar”, que se podría traducir por “seminario basado en internet” o “seminario online”. Se trata de un evento donde participan de un lado unos ponentes y del otro estudiantes o personas interesadas en el tema del que trata la sesión. Cuando hablamos de un webinar puede tratarse de una presentación, una clase o un seminario que se transmite a través de la web utilizando una videoconferencia en vivo.

La clave de un webinar son sus elementos interactivos, la habilidad de dar, recibir y discutir información desde cualquier punto del planeta y de forma simultánea. De este modo un webinar contrasta con un webcast, en el que la información se transmite unidireccionalmente y no admite interacción entre el presentador y la audiencia. En ocasiones incluso pueden responderse encuestas durante los webinars.

¿Cómo se vinculan los webinars a la educación?

La web permite que la educación tenga un fácil acceso desde cualquier punto del mundo con conexión a internet, por lo que los estudiantes pueden recibir materiales educativos como deberes, horarios de exámenes, resultados de los test realizados… Algunas clases participan en sesiones de chat semanales de forma que los estudiantes pueden interactuar entre ellos mientras aprenden un tema en particular, enriqueciendo así su proceso de aprendizaje.

Además, la mayoría de universidades ofrecen información sobre sus cursos,  sobre el proceso de admisión y sobre la propia universidad a través de internet; ya sea en una página web estática o a través de las redes sociales. Pero cada vez más universidades deciden realizar otras acciones comunicativas para poder captar estudiantes internacionales, por lo que buscan otros canales en los que los estudiantes potenciales puedan interactuar con los miembros de la universidad. De esta forma surge la integración de los webinars en los procesos de reclutamiento, con muchas ventajas tanto para las universidades como para los estudiantes.

Podemos ver, por ejemplo, el portal www.thestudyabroadportal.com, donde los estudiantes pueden elegir entre una gran variedad de webinars gratuitos en los que se presentan cursos de posgrados y doctorado de universidades de todo el mundo. Así éstos tienen la oportunidad de conocer en profundidad el curso y la universidad e interactuar con los miembros de la institución para que resuelvan sus dudas desde cualquier punto del globo.

¿Pueden utilizarse los webinars para aprender español?

Los webinars son una excelente herramienta para aprender idiomas ya que, a parte de juntar a un profesor y a uno o más alumnos en un mismo espacio al mismo tiempo, permite reproducir presentaciones en las que se puede mostrar ejemplos de construcción de frases, vídeos, escritura instantánea por parte de profesor y alumnos… De esta forma se puede aprender un idioma participando en una clase desde la comodidad del hogar en cualquier país del mundo.

A diferencia del típico curso de español en el que el estudiante compra un libro y unos CDs, un webinar permite que el profesor escuche los errores de pronunciación del alumno y le enseñe cómo debe colocar la lengua para producir los distintos sonidos que suelen dar problemas a muchos extranjeros, como el sonido de la ‘J’ o la ‘R’. Además, el profesor puede profundizar en el aprendizaje de la lengua española explicando cosas que jamás aparecen en los libros, como diferencias entre el español de España y el de Latinoamérica.

Este último punto resulta verdaderamente importante si se tiene en mente realizar un viaje a Sudamérica para evitar malentendidos. Véanse estos ejemplos: mientras que en España la palabra “coger” significa asir o agarrar algún objeto, en determinados puntos de Latinoamérica la misma palabra escrita “cojer” significa realizar el acto sexual ¡Hay que tener cuidado para no tener que evitar una situación embarazosa! Asimismo, la palabra “ligar” significa “pegarse”, por lo que la frase “salir a ligar” tiene un significado totalmente diferente en sendos lados del Atlántico.

El viajero aprende mejor.

Cristóbal Colón

Mucho ha llovido, sobre todo en el norte de España, desde que hace 523 años al chico más espabilado de la clase, un tal Cristóbal, le diera por cruzar el charco en busca del Nuevo Mundo. Colón el explorador no podía ni imaginarse la magnitud de su descubrimiento al desembarcar en Las Bahamas.

Lo que tiene hacerse famoso. Todavía hoy no se sabe a ciencia cierta si su origen era portugués, extremeño, gallego, andaluz, catalán, castellano, genovés (tesis ampliamente defendida) o incluso inglés. El lo ocultó por motivos religiosos, políticos o de clase social. Motivos que podrían haber hundido la carrera del Almirante.

Ni los famosos de hoy ocultan sus orígenes, ni para viajar a otro continente necesitas tu propio navío. Toda una súper generación de jóvenes universitarios, la actual, lo sabe bien y es consciente de lo que cuesta abrirse camino en una globalidad competitiva y conectada en su totalidad. ¿En qué momento se nos ocurriría pensar hace 10 años que los community managers iban a ser piezas clave en las empresas de 2015?

La vida es cambio y hay que adaptarse al medio (he entrado en «modo cita» sin buscarlo). Tendemos a vivir realizando trabajos que nos gusten cada vez más; que nuestra ocupación profesional sea nuestro hobby y que nos aporte cierta cultura. Como consecuencia la oferta universitaria y de formación en general crece en su heterogeneidad. Se adapta al medio. Los profesionales del coaching y los pilotos de drones nos lo han dejado claro.

El turismo idiomático o lingüístico (“Se llama turismo lingüístico a los viajes que se realizan al extranjero para poner en práctica actividades relacionadas con el aprendizaje de su lengua” (Baralo, 2006)) es producto de la necesidad de aprendizaje y del deseo de expansión en otras culturas. Esta forma de turismo al igual que la nueva ola de trabajos, quiere  embarcar en la misma carabela de cultura y lenguaje. Aprender, viajar y divertirnos todo en una misma píldora emocionalmente buena a la que llamamos inmersión lingüística.

Hubiera sido estupendo que Cristóbal Colón y su tripulación hubiesen aprovechado sus numerosos viajes a las Indias (Cuba, Puerto Rico, Honduras o Venezuela) para practicar la lengua indígena y fomentar el intercambio lingüístico. ¿Lo hicieron? De vuelta a casa se hubieran convertido en trending topic entre las celebridades ilustradas españolas. Retwitteados una y mil veces sus préstamos léxicos y creando escuela en el sentido más amplio de la expresión:

El cacique del Caribe bajó de la hamaca y preparó una barbacoa de caimán y tiburón con guacamole. Ensalada de aguacate, tomate, yuca y maíz. Después junto a los micos y las llamas, fumaron tabaco, comieron papaya y bebieron tequila.

Colón era un hombre de mar. Los documentos escritos que conservamos del marino son una amalgama de varias lenguas en los que se pueden leer anotaciones mayoritariamente en castellano pero con evidentes giros lingüísticos naturales del portugués y catalán. A raíz de sus viajes nuestra lengua se enriqueció con novedades léxicas tomadas de las etnias precolombinas como cacahuete y tabaco o canoa y hamaca (estos últimos son los primeros americanismos según explica el almirante en su diario).

El viajero aprende mejor. Lleva y trae experiencias, costumbres, palabras. Contagia su espíritu aventurero. El viajero comprende mejor el mundo y tiene mayor conciencia de la libertad.